El Celleret de la Marta nace de la necesidad de crear cosas con pasión.
Tras un tiempo en paro provocado por la Gran Crisis, Marta, junto a su socia de entonces, creó este pequeño negocio para compartir con la gente esa pasión por el vino que es difícil transmitir solo con palabras. Los procesos de elaboración del vino y del cava les fascinaban: ¿cómo podía ser que de una fruta tan pequeña saliera un producto tan fino, con tantos matices y con sabores y aromas tan diferentes?
Empezamos descubriendo vinos de pequeñas bodegas, pequeños tesoros desconocidos, y compartiéndolos con amigos y familiares. Poco a poco, la gente nos pedía consejos, botellas y cajas. Fue entonces cuando creamos El Celleret de la Marta, en otoño de 2013, y pronto empezó a crecer, tanto en número de pedidos como en bodegas que querían estar presentes en el Celleret.
Hoy en día, El Celleret de la Marta es mi proyecto personal. Soy Martí, y me he unido a esta aventura con la misma pasión y entusiasmo con los que Marta la puso en marcha. Aunque gestiono la tienda de forma individual, cuento con colaboraciones externas para asegurarme de que el proyecto siga creciendo de forma sostenible y con el mismo compromiso de siempre. El Celleret de la Marta siempre se ha mantenido fiel a su filosofía: acercar a todo el mundo vinos y cavas de excelente calidad, desconocidos por el gran público, y a precios para todos los bolsillos.
Trabajo directamente con pequeñas bodegas familiares y jóvenes emprendedores, y quiero ser tu bodega en casa. ¡Con nosotros tienes la garantía de una compra segura y de confianza!
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